15.魏慧:《漂亮的翅膀》Wei Hui: Las Alas Bonitas
Wei Hui comentó que Ji Hui había acudido al hospital para un examen médico, pues se lo conté yo después de haberlo averiguado con tiempo.
De momento aún no se habían descubierto relaciones entre Ji Hui y Chen Yunchang. De todas formas había conseguido tapar la tronera indiscriminada de Wei Hui.
Ella se dio cuenta de que yo estaba defendiendo el honor de Ji Hui.
Wei Hui se entretenía siempre en su ¨parcela personal¨ literaria, escribiendo unos artículos insignificantes. Unos días después, publiqué un texto suyo llamado Las Alas Bonitas.
Se trataba de una promesa que le hice, como recompensa de su ¨callada por mí¨. El artículo Las Alas Bonitas mencionaba no sólo a Ji Hui sino también a Sanmao.
Esa misma tarde del día de la publicación, Wei Hui vino otra vez al periódico. Esquivando el encuentro de Wang Yu, ella me detuvo. Sin saber de dónde había traído un gran ramo de flores, diciendo que me lo quería consagrar. Todo el mundo de la agencia de noticias presenció esta escena.
- Corre a coger un cacharro, vaso también vale, para ponerlo dentro.- Se remangó como para ayudarme.
¡Sabía que otra vez se iba a pasar! No me quedaba otro remedio que sacudir la cabeza, encontré primero un vaso usado debajo del escritorio, eché un poco de agua en él, y metí las flores dentro.
- Adelante, ¿qué más quieres de mí?- Pregunté.
A un lado y sin proferir una palabra, me miraba cómo echaba el agua, metía las flores, e incluso fingía una admiración.
Más tarde, señalando las flores en ese vaso, me inspiró diciendo - Vuestro sitio parece de verdad una parcela, una tierra, siempre da flores cualquiera que se plante aquí.-
Bromeé - Claro que sí, pero el redactor jefe Wang es el dueño de esta tierra, somos sólo sus asalariados a largo plazo. -
Ella estaba de acuerdo, y aplaudió también varias veces con exageración - Sea asalariado, sea terrateniente, están en tus manos las herramientas. ¿ Y por qué no te aprovechas de este desmadre entre las medias para conseguir algo gordo? Por ejemplo, véte a investigar en lo profundo sobre ese funcionario corrupto Chen Yunchang, y enseñarlo al público como una novela testimonio, tan atrevida como llamativa, será un bestseller sin duda alguna.- Le enfrié enseguida el entusiasmo diciendo - Los datos internos de la Fiscalía no pueden ser publicados, que es una directriz en las medias, sino causará graves consecuencias en la sociedad. -
Ella hizo un gesto frustrado, extendiendo sus manos, después de que sus ojos sagaces dieron varias vueltas en las cuencas del ojo, me volvió a persuadir - Las oportunidades se van volando.-
Le pregunté de vuelta - ¿No es que esa ¨parcela personal¨ tuya está teniendo buenas cosechas? Debes seguir excavando esas materias sobre Hu Yancheng y Zhang Ailing. - Ella se quedó parada un poco, al darse cuenta de mi sátira, se volvió hasta seria - Cuando no tengo nada que cultivar, cultivo algo ¨viejo¨ que contiene más entretenimiento que cualquier cosa. Pero ahora con tanta mercancía nueva que va saliendo sin parar, ya no tengo que molestarlo más. Seguro que esa multitud de mujeres detrás de Chen Yunchang tiene mucho que escribir.-
- No puede ser, no vas a poder publicar aunque lo escribas. Este tema es sensible en la sociedad, ¡los lectores se imaginarán enseguida de quién hablas al ver que todo es de negro!-
Al confirmar mi cara, ella estaba consciente de que no podía ser más sincero - Ahora está bien, un montón de mujeres rodean a un solo oficial corrupto, hasta Chen Yunchang ha sido detenido. Ya puede ¨sacar todo al aire¨ vuestro periódico. -
- Pero te has olvidado otra vez, puede haber riesgos invisibles si mencionas a alguien por nombre, ¿no es que he recibido balas hace poco?-
Nada más escuchar sobre las balas, su rostro se cambió de color. Meneó su cabeza exageradamente como señal de despertarse de nuevo.
Wei Hui estaba al tanto de la cita entre Gao Jin y yo aquella noche, sin embargo, no conocía muy bien el contenido concreto de esa noche. Pues yo había empezado a suponer plenamente todo tipo de amenazas que ella podría plantearme. Todavía no me podía permitir a ofenderla aparentemente.
Una vez más, fui invitado a la residencia de Wei Hui, ella preparó una mesa entera de platos para darme la hospitalidad. Aunque sabía que ella quería pedirme cosas, me hacía el sueco.
- ¿ Se puede adelantar la fecha de vuestro 《El Gran Foro del Oriente》? Luego tendré una agenda muy apretada.- Wei Hui sacó dos copas y abrió una botella de vino tinto.
En realidad yo podía tomar la decisión sobre este asunto, pero igualmente fingí hacer una llamada al despacho delante de ella, el hecho de hacer esta llamada conllevaba dos motivos: uno era para contarla, que este asunto requería un ¨proceso¨; segundo era para que sepa, que habían demasiados candidatos dispuestos para dar discurso en este foro, había sido puramente un gran favor el darte esta oportunidad por adelantado.
En la pared de la habitación estaban colgadas varias fotos de ella en la piscina. Llevaba unas gafas de sol y un bikini, la pose tenía algo de encanto romántico. Pero no parecían de últimos dos años.
- ¿Qué tal? ¿ No estaba mal,eh? - Al notar mis ojos clavados en la pared, se acercó diciendo.
- ¡Y ahora tampoco estás mal!- regresé a la mesa, lisonjeando.
Justo cuando levantamos las copas para beber, Henry acudió. No estaba nada descontento viéndonos a solas. Al contrario, pidió un gran vaso a Wei Hui y se sentó a mi lado.
Wei Hui dio un suspiro, se encontraba un poco abrumada. Dejó sus palillos, su actitud en ese momento indicaba otra cosa: Ella no quería ver a Henry allí en aquel entonces. Pero este ¨laowai (1)¨, en vez de irse después de beber y comer, acercó a sí la cara de Wei Hui en mi presencia, mostrando gestos cariñosos.
Por fin Wei Hui no podía aguantar más, apartó la mano que él extendió para acariciar su pierna. Me preguntó mirando hacia mí, ¿Ji Hui era una persona muy cohibida? Y mi respuesta era - ¡Depende de la situación! - Yo sabía que ella lo dijo por ese ¨laowai¨.
Efectivamente, Herry llegó a oler un ambiente anormal. Se comportó bien, extendió sus manos e hizo un gesto de encogerse de hombros.
Wei Hui tenía mucho interés sobre las partes amorosas en las novelas de Ji Hui. Ella propuso otra vez un viaje a la Ciudad de Xihai. Le obstaculicé rotundamente esta operación suya.
- Xihai es el origen de Ji Hui, no se debe ir allí para socavar su base.- Expresé mi actitud.
- ¿Cómo se puede tomarlo como ¨socavar su base¨? Se debe llamar como ¨desarrollo sostenible¨, es el término más moderno actualmente, suele aparecer en los reports de economía, ¡sólo que ahora lo uso en la literatura! -
Ella comentó que este magnífico libro que empieza a ¨engendrar¨ en su barriga en estos días, era como una constipación literaria, si no se caga o no se caga bien, iba a sentirse muy mal.
Yo estaba al tanto de que Wei Hui tenía a muchos hombres rodeándola. Siempre había tenido un deseo, que era, con ayuda de una constipación literaria, convertir toda esta acumulación de materiales malísimos sobre ellos y ella en textos, ordenarlos, y después ganar dinero con los mismos. El pasado de Ji Hui en Xihai, sobre todo su pasado en el club era un misterio para mucha gente, hasta yo lo sabía a medias, ahora muchas cosas habían entrado en la historia ya que la persona en cuestión ya no estaba viva. Yo no quería estigmatizar la dignidad humana de Ji Hui.
Ahora antes de dormir, solía coger este libro La Vida Disoluta En Xihai para leer unos párrafos. Me enteré del desarrollo pasado de Ji Hui cuando era una niña, un desarrollo sumergido en relaciones, en sangre y lágrima y en el dinero, y había logrado asociarlo con sus comportamientos raros a mis ojos en el antaño. Antes ella fumaba,¡ al día fumaba mucho! Entonces saqué datos y fotos sobre cáncer de pulmón para asustarla, pero ella dijo - sólo ella sabría el día que querría morir, pero no iba a morir de estas enfermedades.- Pues había acertado con esta palabra. Desde el primer grado de universidad, me convertí también en su compañero tanto de tabaco como de vino. Sin saber si era bueno o malo. En la uni, varios colchones se quemaron por su descuido a la hora de fumar, cualquiera de estos casos podría causar incendio. Profesionalmente ella siempre proclamaba lo grande, y despreciaba a esos oficinistas gandules. Sus emociones eran versátiles, lo que me costaba entender era: siendo hija de un corriente profesor de secundaria, podía chocar tanto con esta sociedad y tener una ideología tan rebelde.
En esos días que nos correspondían, fumabamos, bebíamos, hacíamos amor, cada día era el comienzo, y también el fin.
* (1) ¨Laowai¨: nombre equivalente a ¨extranjero¨ en China.